Misterio - Carlos Jiménez

Parafraseando a la eminente abogada española María Fernanda Silva “Misterios, lo que se dice misterios, hay pocos. Lo que hay, se llama Ciencias Naturales”. Si bien es cierto que la ciencia podrá explicar el cien por cien lo que acontece en el mundo, es también cierto que gran parte de los hechos de la realidad están rodeados de un cierto halo de misterio. Focalizando nuestra atención al mundo del diseño, lo que resulta más críptico son los procesos de la mente que se desarrollan de forma inconsciente o premeditada para obtener un resultado novedoso, único y sorprendente. Dicho de otra forma, lo verdaderamente interesante y misterioso a la vez, es comprender los principios que determinan que un resultado sea creativo, o simplemente, sea una iteración de algo ya existente. Estos factores han sido definidos y estudiados por Todd Lubart1, profesor de psicología en la Universidad París Descartes, en cuyos ensayos desenmaraña las claves del proceso intelectual, necesario para desarrollar innovaciones en cualquier ámbito de la creación teórica.

El campo de la arquitectura, al establecer puentes entre el mundo teórico y el mundo físico, no encuentra una respuesta completa en los estudios de Todd Lubart. Por lo tanto, nuestra tarea en este foro será presentar los nueve misterios fundamentales de la creatividad con los que el diseñador se enfrenta en cada proyecto:

1 Todo comienza en el preciso momento en el que se recibe un misterioso encargo o simplemente se descubre un pequeño nicho de nuestro entorno que nos resulta conveniente completar, mejorar y/o corregir. La capacidad de observación de la realidad constituye una fuente certera e inagotable de oportunidades de diseño. Pero el éxito, desde el punto de vista creativo, reside no tanto en la detección de un problema, sino más bien en la estructura de representación del problema a resolver.

2 El segundo es el misterioso cóctel de los conocimientos previos. Toda la información almacenada en el cerebro, ya sea adquirida mediante procesos formales (estudio, investigación, etcétera) o informales (adquirida por medio de la experiencia del día a día, o por otros medios) se recombina de forma consciente e inconsciente, produciendo múltiples resultados. Cuanto mayor sean los conocimientos del individuo o grupo, mayor número de opciones originales se obtendrán.

3 El misterio de la innovación. En un mundo en el que la innovación es fundamental para la supervivencia del diseñador, es importante destacar que esta no depende de cualidades innatas, sino en gran medida de los estilos de pensamiento que utilizamos, como lo son: dejarte guiar por la intuición, realizar pequeños ajustes sobre lo que ya existe, reestructurar un problema desde ángulos diferentes, contraponer aspectos globales y parciales del contexto al que pertenece el problema.... entre otros.

4 La misteriosa decisión.... que siempre es arriesgada. No todas las opciones de diseño son igualmente innovadoras, útiles y/o convenientes. Tan solo una ínfima parte de las alternativas se ejecutarán y someterán a prueba. Por lo que podemos certificar que una solución creativa implica riesgo. La personalidad del diseñador se revela clave en este punto, pues la perseverancia, tolerancia al fracaso e incluso la autoestima (entre otras cualidades), posibilitará que se recorran caminos de diseño no habituales, pudiendo dar lugar a soluciones visionarias.

5 La misteriosa fuerza interior que no te permite abandonar. La motivación (o ‘fluido vital’ como lo define el grupo de música Astrud) es clave para la consecución de los propósitos del diseñador, pues no se trata de un camino fácil, sino de exploración pura y dura.

6 El misterio del entorno creativo. Tanto en el campo del arte (The FactoryBlack Mountain College) como en el de la arquitectura y el diseño (BauhausZuloark y su Campo de Cebada) el entorno en el que se desarrolla la creación influye de forma inequívoca en el resultado que se obtendrá. Las condiciones físicas del espacio, el acceso a tecnología específica, la posibilidad de desarrollo individual, la diversidad cultural, la masa crítica que se alcanza y las relaciones colaborativas que se conforman, e incluso la carencia de ellas, aumentan de forma constatable las posibilidades de encontrar respuestas innovadoras a los problemas detectados.

7 El misterioso poder de la acción. Durante la fabricación de muestras, pruebas y prototipos, se determina una relación entre componentes ligeramente diferente a la establecida por la comunidad de creadores en fases previas de diseño. La realidad se encarga de operar combinaciones fortuitas, nuevas aportaciones e incluso errores, que definirán iteraciones inesperadas con anterioridad. La acción es, en sí misma, el equivalente a lo que sería un estilo de pensamiento ‘radical’.

8 El penúltimo de todos es el misterioso resultado, que nace con vocación de mejorar la vida de usuario o del contexto (en cierta medida). Este resultado siempre supone una sorpresa imposible de predecir al principio del proceso de diseño. Lo voy a ilustrar con una imagen del proyecto final de curso desarrollado en el 2013 Bartlett Summer Foundation2, en el que estudiantes3 de todo tipo de culturas y profesiones (sin conocimientos de arquitectura previos), deciden enrolarse durante tres semanas para descubrir en qué consiste el mundo de la creación arquitectónica contemporánea.

9 Y el último misterio de todos, el fundamental, es el misterioso uso que el destinatario final del invento dará a su nueva pieza. Sin duda, un acto creativo en sí mismo.


1 Confluence Approach Toward Creativity, Tood I. Lubbart (1994).

2 Tutors:
- Semana 1: Casaleganitos + Emilio García Navarro.
- Semana 2: Nacho Bautista, Tom Svilans, Megan Smedy + Carlos Jiménez.
-Semana 3: Tom Svilans, Megan Smedy + Carlos Jiménez.

3 Students:
Estructuras: Adrienne Young y Cynthia Tian. Espacio habitable y construcción modular: Duncan Lomax y Ivy Yuchen Cao. Hábitat vegetal: Rumpa Paweenpongpat, Jessica Apps y Simon Glemser.


Carlos Jiménez Cenamor (Casaleganitos). Tutor de la UNIDAD 22 junto con Izaskun Chinchilla. Y director del Bartlett Summer Foundation. The Bartlett School of Architecture, Univerisity College of London, Reino Unido.